dilluns, 9 d’abril del 2007

Una de sobredosis, siusplau

Ezequiel 25-27: El camino del hombre recto está por todos lados rodeado por la avaricia de los egoístas y la tiranía de los hombres malos. Bendito sea aquel pastor que, en nombre de la caridad y de la buena voluntad, saque a les débilos del Valle de la Oscuridad. Porque Él es el verdadero guardián de su hermano y el descubridor de los niños perdidos. ¡Y os aseguro que vendré a castigar con gran venganza y furiosa cólera a aquéllos que pretendan envenenar y destruir a mis hermanos! ¡¡¡Y TÚ SABRÁS QUE MI NOMBRE ES YAVÉ, CUANDO MI VENGANZA CAIGA SOBRE TI!!!


BANG
(i un cap rebentat al seient del darrera)



Doncs això, que la venjança és un plat que es serveix fred, i sinó tiempo al tiempo...





Per començar, muerte a la rutina!






2 comentaris:

..LeDe.. ha dit...

...y Yavé sometió a los isreaelitas a una purificación interna que simbolizó el perdón:

"Os daré un corazón nuevo, arrancaré de vuestra carne el corazón de piedra y os daré un corazón de carne"
(v.26)

Anònim ha dit...

Pulp Fiction para siempre xD, un saludo Annouk!